SENTMIENTOS ENCONTRADOS

Acostumbrarse a las cosas es normal, tener un celular a diario, tv, o algún aparato electrónico en general, incluso a un vehículo, al refrigerador a la estufa, son cosas que usamos dentro de nuestra vida cotidiana, sin embargo, ¿qué hay de las personas? ¿también nos acostumbramos a ellas como un objeto más?, quizás sea grosero, irrespetuoso y todos los insultos que se les ocurra, pero lamento decirles que así nos pasa a muchos, estamos tanto tiempo con las mismas personas, haciendo lo mismo todos los días que se convierten en elementos comunes dentro de las escenas diarias que vivimos.

Hoy, después de 4 años y algunos meses creo que he dejado de creer en varias cosas, he dejado perder aquella esencia que algún día me hizo llegar hasta donde estoy hoy, me he olvidado de detenerme pensar, observar, reflexionar, me convertí en una máquina programada para levantarse a cierta hora todos los días, ir a trabajar, trasladarme a la universidad, llegar a casa para cenar, terminar pendientes y dormir, fines de semana los utilizaba para estar con una persona que a pesar de lo que ha sucedido estimo mucho,
también eso se convirtió en una rutina, llegar, medio platicar, medio ver la televisión, medio hacer otras cosas, nada completo ni concreto, y se ha repetido ya por mucho tiempo.

¿Sentimientos encontrados por qué? Porque una parte de mi pide a gritos buscar mi propio camino, dejar de buscar en los demás cosas que me llenen y satisfagan mi espíritu porque no llegarán, quiere alejarse de todo, retomar ese espíritu aventurero que tenía de salir y llegar hasta donde sus pies quisieran, quiere salir corriendo, dentro de sí sabe que necesita urgentemente encontrarse a sí mismo una vez más, conectar esa esencia que ha dejado perder con el ser vivo que hoy se mueve por inercia y un poco de convicción; su contra-parte dice que no, que está en un estado de confort que no quiere dejar, haciendo el mínimo esfuerzo por cualquier cosa que se le pida, desinteresado de lo que suceda a su alrededor y concentrado en sus intereses nada más, sin importarle a quién se lleve en el camino o a quién deje.

¿Qué puedo hacer? Estoy frente a un camino dividido, uno es arriesgado y aventurero donde sé que a pesar de los sufrimientos y la desgracia que pueda enfrentar, en algún punto encontraré mi equilibrio mental, psicológico y sentimental, el otro es un camino muy fácil, donde las luchas y pruebas se pueden dejar pasar e ignorarlas como si no sucediera nada y seguir de largo el camino, consciente de la soledad que lo acompaña y de su destino que es incierto  y no sabe si en algún punto se reencontrará con sí mismo o simplemente se perderá...